Una de las necesidades con las que cuentan los gestores de comercios online es la de desindexar una URL porque no quieres que siga apareciendo en las SERPs de Google. Esto puede ser una necesidad temporal o permanente, y es igual de válida que la necesidad de indexar URLs que no indexan o que han sido desindexadas.
En este post, te contamos por qué motivos puede ser necesario desindexar una url o cómo se puede hacer.
¿Qué supone desindexar una página de Google?
Desindexar no es otra cosa que hacer desaparecer una o varias páginas de los resultados de búsqueda de un buscador, en este caso, Google.
Generalmente, es Google el que, de forma automática, se encarga de desindexar URLs porque encuentra diferentes problemas en los contenidos; sin embargo, también es posible que tú necesites hacerlo debido a varios motivos: contenido duplicado o erróneo, canibalización, falta de tráfico… o porque no quieres que cierta información esté pública y accesible desde un buscador. Antes de ejecutarlo, te recomendamos informarte de lo que ello supone con un buen profesional SEO.
¿Cómo desindexar una URL?
Existen varias maneras de desindexar una URL. Todas ellas funcionan igual, solo son caminos diferentes para llegar a un mismo fin. Son los siguientes:
Con Google Search Console
Dentro de Google Search Console existe una herramienta para retirar temporalmente urls de los buscadores. Lo más importante de esta opción es que puede deshacerse en cualquier momento.
En la barra lateral izquierda de Search Console, fíjate en el apartado de Indexación y haz clic en Retirada de URLs. Ahí podemos hacer clic en Nueva solicitud y retirar una página específica o las que tengan un prefijo determinado.
Incorpora la etiqueta noindex en el meta robots
La metaetiqueta noindex le dice a Google que no indexe esa URL, pero no es tan inmediato como otras técnicas. Se aplicará el cambio cuando el buscador vuelva a hacer el rastreo automático; es decir, no se hace a preferencia del usuario.
Es importante recalcar que es posible que la etiqueta noindex no funcione si también se bloquea esa URL en robots.txt.
Etiqueta canonical
Si la página que queremos eliminar del buscador está vinculada a una URL duplicada o una variación, puedes utilizar la etiqueta Canonical para señalar la que no quieres indexar o, más bien, a la que quieres darle más importancia.
Pero ¡ojo! A diferencia de los casos anteriores, Google puede ignorarla, ya que su función original no es desindexar urls.
Devuelve un 404 o un 410
Esta solución tan solo es recomendable en caso de que quieras desindexar un contenido porque ya no lo tienes en la web, no porque quieras ocultarlo. En este caso, si Google realiza una petición al servidor de la URL que quieres desindexar, debe devolver un 404. Con el paso del tiempo, cuando Google ve ese 404 repetidas veces, la desindexa. Es decir, si quieres que una de tus URLs se desindexe por no tener contenido, esta puede ser una solución; sin embargo, no es la más óptima.
Bloqueo mediante contraseña
Mediante este método, Google no podrá acceder a la página y entenderá que tu contenido no es indexable. ¡Importante! Esto no será efectivo si dicha URL está enlazada por dominios externos; aunque no pueda verla, comprueba que “existe”.
Si bloqueas un contenido con contraseña, aunque Google lo indexe, no verá el contenido. Por eso, para conseguir que el contenido no aparezca en las búsquedas, puede ser la mejor opción; sin embargo, la forma más óptima de hacer esto es combinar el bloqueo con contraseña con un noindex, de forma que no pueda ni ver el contenido ni indexarlo.
Desindexación masiva mediante el sitemap
Si tenemos la necesidad de desindexar un número considerable de urls, lo mejor es crear un sitemap con aquellas que quieres desindexar –que deben devolver un 404 o un 410– y avises a Google, mediante Search Console, de que lo revise y acelere el proceso de desindexación.
Aunque esta sea una opción válida, lo cierto es que esta no es la principal función del sitemap. Una desindexación masiva por medio del sitemap es algo que solo debería hacer un profesional que sabe por qué y cuándo hacerlo. No es recomendable hacerlo en todas las situaciones, sobre todo si no sabes cómo proceder.
Si, pese a toda esta información, no tienes claro qué debes hacer o cómo, a través de una auditoría SEO podrás tener una visión global del estado de tu sitio, conocer los errores que están presentando tus URLs y la mejor solución para cada una de ellas.
